ASPECTOS GENERALES
La ruta comienza y termina en dos ciudades declaradas Patrimonio de la Humanidad por la
UNESCO en 1985 y 1994 respectivamente, un ingrediente adicional para quien desee conocer
estas dos bellas localidades.
El trayecto transcurre por cuatro comunidades autónomas. Comienza en Castilla y León, cruza a
Castilla la Mancha, transcurre un pequeño tramo por Extremadura, regresa a Castilla La Mancha
y finaliza en Andalucía.
Nos ‘enfrentamos’ aproximadamente a 450 kilómetros por una carretera nacional poco
transitada y cuyo asfalto es, en ocasiones, irregular. En algunos tramos, sobre todo por Castilla
la Mancha y Extremadura, echaremos en falta una mejora de la conservación de la carretera.
Esto nos obliga a ser prudentes e ir atentos, sobre todo en curvas amplias en las que vayamos
‘tumbados’, porque el susto puede estar asegurado. No obstante, con una conducción sensata
y sin rebasar los límites de velocidad marcados no corremos peligro.
A lo largo del trayecto hay suficientes gasolineras para no tener que preocuparnos por el
repostaje, salvo que nuestra moto sea de baja autonomía. En estos casos es conveniente no
‘apurar’ nuestro depósito. En mi caso, que viajo en una BMW R1200 RT, tengo autonomía más
que suficiente para no estar demasiado pendiente. En esta moto, si circulas a una velocidad de
100 km/h y gestionando bien las marchas, la autonomía puede llegar a los 400 km. Ahora bien,
si ‘giras’ un poco el puño y revolucionas el motor la cosa cambia y al ‘boxer’ le entra la sed.
La ruta transcurre por unos parajes realmente bonitos, sobre todo para un gallego,
acostumbrado a otra orografía cuyo contraste con la que puede verse a lo largo de la N502 la
hace especialmente atractiva.
Para terminar esta sección de aspectos generales hemos de tener muy en cuenta “el cuándo”
decidimos emprender el viaje. La N502 transcurre por una parte de nuestra geografía
extremadamente calurosa en verano, por lo que elegir bien el momento de subirnos a nuestra
moto evitará que nos disolvamos dentro de nuestra vestimenta motera. El frío y hasta la lluvia
se puede combatir bien con todo el elenco de prendas de ropa para moto que tenemos en el
mercado, pero el calor extremo no lo podemos evitar y puede hacer de nuestra ruta un
verdadero martirio.
CUESTIONES PARTICULARES
Me gustaría destacar los dos tramos con más curvas en los que sacar partido de nuestra
destreza motera.
El primero de ellos es poco después de Ávila. Empieza en un pueblo llamado La Hija de Dios y
termina en Ramacastañas (ambas localidades pertenecientes a la provincia de Ávila). Son 50
kilómetros de cuervas por buen asfalto que nos harán pasar un buen rato.
El segundo de ellos transcurre desde La Nava de Ricomalillo (provincia de Toledo) hasta
Almadén (provincia de Ciudad Real). Es un tramo largo, de aproximadamente 150 km, de
asfalto manifiestamente mejorable, pero que nos permitirá disfrutar igualmente de la ruta.
En este tramo hay dos paradas obligatorias. La primera al comienzo, en La Nava de Ricomalillo
Se trata de la Quesería de La Jara. Es una quesería artesanal, regentada por una persona
joven que elabora distintas modalidades de queso procedente de su propia ganadería de
cabras criadas en los alrededores de su pueblo. El local invita a ser visitado y degustar sus
quesos y vinos. Resulta especialmente satisfactorio, al menos para mí, comprobar como
algunos jóvenes apuestan por negocios en zonas rurales, luchando contra la despoblación, la
marginación y el envejecimiento de muchos pueblos de España.
La otra parada que no nos dejará indiferente es el embalse de Cíjara (provincia de Badajoz),
construido en el año 1956 y destinado al abastecimiento de riegos y a la producción de energía
eléctrica. El salto es imponente y una parada para descansar un rato y sacar unas fotos vale la
pena.
Jorge
Septiembre 2023